Nostalgia...

Recuerdos de una juchiteca.

Ya quiero estar en Juchitán, es que todo sabe distinto, hasta ese café de caldereta que se pone en el fogón y empieza a chiflarte como seduciendo el sonido. Quiero estar en Juchitán, porque hasta los árboles te quieren arropar por el vaivén de los vientos.

Quiero estar en Juchitán para mojar mis pies de Playa Vicente, llenarme del olor a mar, aire libre y tierra en la boca.

Quiero estar en Juchitán, porque deseo sentarme en el parque, tomarme un bupú y eludir una cagada de zanate.

Quiero estar en Juchitán, a lado tuyo, de tu viento, de tu idioma, de tus jeroglíficos y flores tatuados en piel.

La Teca de oro.

30 de octubre, 2016